Tomar cada corriente de las aguas lleva a un punto diferente en el horizonte. El error está en no darse cuenta cuál corriente se toma y que se puede elegir fácilmente entre la una y la otra. El estratega tiene rápidamente en cuenta cuáles posibilidades tiene adelante y escoge las mejores para su tripulación.
Sin embargo también está el pincel de la espontaneidad. Es de maestros saber pintar los huecos en el horizonte cuando se acercan y con la seguridad y firmeza necesarias para hacerlo a pesar del poco tiempo que hay al frente.
El semestre entrante me representa un reto mayor. Más viajes y más mares en rugidos. Damas del lago queriendo hundir mi barco y yo: jamás, jamás lo voy a permitir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario